Seguro que alguna vez te has hecho esta pregunta. A todos los padres, especialmente primerizos, le asaltan este tipo de dudas cuando se acerca el momento de ir preparando el armario de su bebé. Buscamos prendas bonitas, cómodas y prácticas para ellos (y para nosotros) pero, ¿cómo elegir el mejor pijama para bebé si hay tantos entre los que escoger?.

En cuanto a peleles, ranitas o buzos hay mucha información pero el problema viene cuando tenemos que hacernos con uno de los básicos más importantes en sus primeros años de vida: el pijama. Hay ciertas cosas que toda madre o padre debería saber antes de tomar una decisión y en el blog de Nait Nait os lo contamos todo. 

Características de un pijama para bebé

Comodidad

Como no podía ser de otra manera, lo más importante en todo momento es el bienestar del bebé. Hay que tener en cuenta que, en las primeras semanas, el caos nocturno será habitual, por lo que no podemos tomarnos este tema a la ligera. Si está cómodo, mejorará su sueño y dormirá de corrido más horas. Además, favorecerá una postura correcta y minimizará los problemas de cólicos de lactante. Igualmente, cuando crezca, tendrá otras necesidades y querrá moverse con él fácilmente, por lo que la comodidad seguirá siendo de vital importancia. 

Parece algo obvio, pero muchas veces nos quedamos en la parte estética, sin tener en cuenta que el confort del niño dependerá mucho de la elección que hagamos. Ten en cuenta que lo habitual es que un recién nacido duerma unas 16 o 17 horas al día y, con un año, unas 13 y 14 horas. Por ello, nuestra recomendación son los pijamas de una sola pieza pues, además de ser super cómodos, evitarán que, con el movimiento, alguna parte del cuerpo quede destapada por la noche. Para los primeros meses, si cubre los pies, mejor que mejor, pero en la etapa del gateo mejor optar por uno que deje los pies libres para los zapatitos o calcetines. 

Calidad

Cada vez estamos más concienciados de la importancia que tiene conocer el compuesto de los tejidos de las prendas que utilizamos, tanto para bebés como para adultos. Hay que buscar e invertir en calidad porque, sino lo podemos pagar caro. 

En el caso que nos ocupa, teniendo en cuenta que el bebé pasará mucho tiempo con el pijama puesto, hay que tomárselo más en serio si cabe. Los tejidos deben ser naturales, suaves, ligeros y transpirables. Para los peques, lo más recomendable es el algodón, por lo que deberás fijarte que estén confeccionados al 100% de este material. Este tejido de alta calidad es más respetuoso con las pieles sensibles y tiene cierta elasticidad, lo que les ayudará a estar cómodos y a tener libertad de movimiento. Además favorecen la transpiración, lo que evita que el bebé sude en exceso y se le irrite la piel, produciendo alergias o eczemas. 

Asimismo, también debemos tener en cuenta las diferentes temperaturas del año y usar tejidos más frescos en verano y reservar los calentitos para el invierno. Ojo, calentito no significa que tengamos que agobiarle. Si lo abrigamos demasiado, se despertará y sudará más. 

Tallaje

La talla debe ser la adecuada, ni más ni menos. Aunque antes del nacimiento es difícil, por no decir imposible, saber exactamente cómo va a ser el niño, debemos procurar que no le quede excesivamente ajustado o corto el pijama, ya que no se podrá estirar bien y perderá movilidad. Sabemos lo que estás pensando: “Acertar es una lotería”. Pues sí y, por eso, suelen ser prendas que se compran amplias y que, además, le durarán un poco más. Pero, no te lo tomes al pie de la letra, un poco amplia no significa grande, que se pueda perder en ella y tropezar. Los bebés crecen muy rápido y hay que adaptarse a sus necesidades, no adelantarnos. 

Estética

Otro punto que nos preocupa a todos, aunque no es el prioritario, es la estética de su ropita. Y es que, no solo nos gusta tener a nuestros niños guapos siempre sino que, según el momento o la situación, el diseño puede llamarles la atención y relajarlos. En cuanto a colores, formas y texturas, encontrarás una infinidad de pijamas para bebés para todos los gustos. Pero, además de parecerte más o menos bonitos, debes tener en cuenta el cometido que quieres conseguir con el niño, pues, sin saberlo, estarás estimulándolo y propiciando nuevas emociones en él. 

Funcionalidad

Este apartado está hecho especialmente para padres o cuidadores, ya que el pijama para bebé también tiene que ser práctico para nosotros. Durante los primeros momentos de vida, la mayor parte del tiempo estaremos cambiando pañales, e incluso pijamas, por lo que, si queremos ahorrarnos más de un disgusto a altas horas de la madrugada, debe ser una prenda funcional y fácil de poner y quitar. ¿La clave? Elegir un pijama con apertura que nos permita cambiarlo sin necesidad de desvestirlo por completo. 

Colección de pijamas para bebés

Ahora bien, teniendo en cuenta todos estos consejos, hay una cosa que se nos escapa… ¿Qué pasa si el niño se destapa por la noche? En la mayoría de los casos, cuando arropamos a los peques, ellos se desarropan y nos pasamos la noche intranquilos, levantándonos a taparlos para que no cojan frío. Y si te decimos que ahora puedes controlarlo y resolver el problema fácilmente, ¿te lo crees?

En Nait Nait vamos a ayudarte con nuestros productos pensados por y para este cometido, los sacos y pijama burbujas. Estos cumplen con todas las características que debe tener una adecuada prenda para dormir. Además, ya está disponible la nueva colección de primavera/verano 2020. ¡Nuevos diseños con tejido de bambula 100% algodón que te encantarán!

Saco burbuja: Talla única: 0-6 meses, pies cerrados. 

Pijama burbuja: Disponible en talla S y M, pies abiertos. 

Nuestros pijamas y sacos burbuja son cómodos para los niños porque son suaves y amplios y, gracias a tejido de bambula 100% algodón, transpiran y no sudan por la noche. Son el sustituto perfecto a las sábanas, y nosotros dormimos tranquilos porque ellos duermen a la temperatura perfecta.

Este tipo de pijama para bebé no tienen mangas pero sí tienen una cremallera invertida para que podamos cambiar los pañales cómodamente. Son holgados, por lo que hacen un efecto real de mantita, guardando el calor corporal y protegiendo las partes más sensibles al frío, que son pecho, espalda, barriguita y la zona de los riñones.

Y lo más importante de todo, los sacos, al ser anchos y suaves, permiten el libre movimiento del bebé para que pueda dormir en la postura recomendada y natural de “ranita” para un correcto desarrollo de sus caderas. Además, en caso de displasia de cadera, el arnés cabe dentro de nuestro saco.

¡Variedad de diseños ideales y actuales!

Colección otoño/invierno 2019

Pijama burbuja: Talla de S a XL, 80% algodón y 20% poliéster.